ORACIÓN 365 GUÍA DE ORACIÓN JUNIO 2014
ANIMA A TU IGLESIA A PARTICIPAR EN ORACIÓN 365
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GUÍA JUNIO 2014
SÁBADO 14 JUNIO EN LAS 52 CAPITALES
JUNTOS EN EL DÍA NACIONAL DE ORACIÓN EN TU CIUDAD
"Cuando terminaron de orar, el lugar en que estaban congregados tembló; y todos fueron llenos del Espíritu Santo y hablaban con valentía la palabra de Dios." Hechos 4:31
Compañero de ORACIÓN 365: ¿Por qué no declaramos este mes de junio el mes de la unidad? De unidad y de estar juntos. Reunión de las iglesias de una misma ciudad, unanimidad en la oración entre regiones y territorios de España en nuestras 52 capitales, esperando una visitación especial de Dios por su Espíritu. En este mes usaremos el programa de oración sugerido para el DNO, Día Nacional de Oración, del sábado 14 de junio. Esta oración nos servirá de preparación, no solo para ese día, sino con miras a las actividades de ¿HAY SOLUCIÓN!, las semanas del 7 al 19 de julio. ¿Cómo podemos usar el programa del DNO durante las 24 horas con ORACIÓN 365? Durante tu turno de una hora de oración, únete con otro cristiano y ora con él/ella por uno o más de los temas de esta Guía. Sugiere a tu pastor y/o coordinador de oración de tu iglesia que en su día con ORACIÓN 365 se haga una caminata por la ruta de
1 - JUNTOS EN
2- JUNTOS Y UNIDOS EL DNO - Sábado 14 de junio: "Ruego que todos sean uno; como tú, Padre, en mí y yo en ti, que también ellos sean uno en nosotros, para que el mundo crea que tú me enviaste." Antes, durante y después del sábado 14, únete a la oración de Jesús para que sus discípulos en tu ciudad sean uno, para que los españoles crean en el evangelio.
http://www.espanaoramosporti.es/images/oracion_2014/plan_oracion_sugerida_2014.pdf
Imprime el programa y ora por los preparativos de las tres actividades del DNO en tu ciudad: El Desayuno de Oración de los pastores con las autoridades,
3- PARTICIPA EN EL DESAYUNO DE ORACIÓN DE PASTORES Y AUTORIDADES: Sea que estés invitado a asistir al Desayuno, o no, tú puedes estar presente. ¿Cómo? Orando. Sigue la oración que se hará en este encuentro entre las autoridades espirituales y los representantes políticos de tu ciudad y región: Confesión: Con las palabras del profeta Daniel (capítulo 9), decimos que hemos pecado. Nos hemos apartado de tus mandamientos. No hemos obedecido a tus siervos, que en tu nombre hablaron a nuestros reyes, padres y a todo el pueblo de la tierra. ¡Qué de leyes inicuas, que al mal lo llaman bien y al bien lo llaman mal! ¡Qué de violencias intrafamiliares, revueltas territoriales y crispación social! ¡Cuánto derroche, corrupción política e injusticia en nuestras instituciones! Petición y ruego: Mira, Señor, con misericordia a nuestros más de 5 millones de parados; la mitad de nuestros jóvenes que salen por miles a otros países en busca de un mejor futuro. Mira a estos 47 millones de almas en España. Concédenos a todos un profundo arrepentimiento y un verdadero avivamiento de la fe, porque esa será nuestra salvación. En presencia de nuestros representantes públicos y a favor de ellos, oramos 1 Tim 2:1-4. Bendición: Abrimos hoy nuestros corazones y las puertas de nuestra ciudad y decimos: Mesías hijo de David, venga a nosotros tu reino. Nuestras familias, autoridades y conciudadanos serán bendecidos con tu reino de paz y justicia. Querido hermano, haz la oración completa según está en el programa. Úsala antes o después del sábado 14.
4- MARCHA POR TU CIUDAD: Haz el recorrido de
5- CONCENTRACIÓN PÚBLICA DE ORACIÓN UNIDA - CONFESIÓN DE LOS PECADOS DE MI CIUDAD: Bien sea que hagas esta oración in situ donde se reúnen las iglesias de tu ciudad el sábado 14, o tú solo desde tu casa puedes usarla antes, durante, y después de ese día: Primer bloque - Confesión: Perdona nuestra división, comodidad y falta de compasión por nuestra ciudad, nuestros vecinos, amigos y familiares. No hemos sabido dar un sonido claro de trompeta ante tus juicios que se avecinan. Perdona la sangre inocente derramada en nuestra ciudad. Perdona sus muchas abominaciones y aberraciones. Perdona su mucha idolatría. Perdona su corrupción política y las ansias de poder y de riquezas. ¡Tanta avaricia, codicia, envidia y rapiña! Vidas destruidas por las adicciones, el suicidio; hogares rotos por la infidelidad y la violencia intrafamiliar
Confesamos por nuestra ciudad los mismos pecados que en su día denunció el profeta Ezequiel (Lee el capítulo 22 en voz alta, cambiando el nombre de Jerusalén por el de tu ciudad).
6- CLAMOR Y RUEGO POR MI CIUDAD: Señor, hoy queremos interponernos entre tu justo juicio y el pecado de nuestra ciudad. Pedimos que por amor a tu nombre no desates tu ira santa y tu furor sobre nosotros. No rogamos que nos saques de la crisis, sino que a través de ella nuestro pueblo se vuelva a ti en arrepentimiento. Sopla como un viento recio con tu Espíritu sobre nuestra ciudad y sobre España. Danos un avivamiento como el del Libro de los Hechos de los Apóstoles. Y ahora, Señor, concede a tus siervos que con toda valentía hablen tu palabra, mientras extiendes tu mano para que se hagan sanidades, señales y prodigios mediante el nombre de tu santo Hijo Jesús (Hechos 4). Que las actividades de ¿HAY SOLUCIÓN! sean propicias para hacer justamente esto. ¡Clamamos por una gran cosecha de almas en todos los sectores de nuestra ciudad!
7- DECLARACIÓN DE BENDICIÓN SOBRE MI CIUDAD: Bendecimos a nuestra tierra y ciudad con las promesas de vida y avivamiento de Isaías 35: Se alegrarán el desierto y el erial
verán la gloria de Jehová, el esplendor del Dios nuestro. Recibimos por la fe y la oración nuevas fuerzas para el cansado
¡Fortaleced las manos cansadas, afirmad las rodillas endebles! Decid a los de corazón apocado: "¡Esforzaos, no temáis! He aquí que vuestro Dios viene con retribución, con pago; Dios mismo vendrá y os salvará... Bendecimos a nuestros enfermos con sanidad: Entonces los ojos de los ciegos serán abiertos y destapados los oídos de los sordos. (Podemos seguir declarando las bendiciones de este capítulo, no solo sobre sectores de población, sino sobre barrios y lugares específicos). Declaración del propósito de Dios para nuestra ciudad: ¿Qué dones ha dado Dios a tu ciudad? ¿Qué propósitos eternos tiene con ella y a través de ella? Escribe una declaración del propósito y llamado de Dios para tu ciudad y entrégala a tu pastor. No pares de orar hasta que este propósito se haya cumplido. ¿Amén? ¡MESÍAS SALVADOR, BIENVENIDO A MI CIUDAD!
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